Aunque todo en marketing funciona con objetivos claros y reales, en email marketing tienen un mayor peso.
Por ejemplo: Si su objetivo es solamente “aumentar ventas” está perdiendo por completo el alcance que podría tener, por el contrario, si su objetivo es “aumento de un 2% de ventas online en un período de los siguientes 15 días” está estructurando un objetivo claro que le permite usar una parte específica de su base de datos, es acá donde tener una base de datos segmentada adquiere valor.
Como su objetivo es aumentar las ventas online, compartirá su pieza de email a aquellos usuarios que tienen este tipo de compra, hacerlo con aquellos que solo llegan a la tienda, sería una mala idea, ya que ellos no conforman el público objetivo.